lunes, 6 de agosto de 2012

Adios, gorrioncito.

Adios, gorrioncito,
vuela libre, te dejo marchar,
yo no sabía que quererte,
era encerrar tu libertad.
Abro mis manos, al tiempo,
que cierro mi corazón,
porque es ahora cuando entiendo,
que, sintiéndote prisionero,
no me hace felíz este amor.
Día y noche yo te quería,
tenía tanta ilusión,
que tus trinos yo confundía,
-sentía por mí ese son-.
Mas, no es así, gorrioncito,
este amor, no es par, es non.
Vuela libre hacia otro nido,
que si tú no eres felíz,
tampoco lo puedo ser yo.


1 comentario:

  1. Dejalo volar mi querida amiga!
    No pongas rejas a la libertad!!
    Bello leerte!
    Mil besos.

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