Si tengo que morír, aunque no quiera,
no sea invierno, sea en primavera;
que cubran mi cuerpo las flores
y así quede envuelta en colores.
Que las aves canten sus trinos
sobre un aire perfumado de azahar,
que los rayos del sol sean finos
y el verde campo vuelva a brillar.
Así, descansar yo quisiera,
cuando la tierra me quiera llamar
y de ésta manera me fuera,
me fuera tranquila, a un divino lugar.
no sea invierno, sea en primavera;
que cubran mi cuerpo las flores
y así quede envuelta en colores.
Que las aves canten sus trinos
sobre un aire perfumado de azahar,
que los rayos del sol sean finos
y el verde campo vuelva a brillar.
Así, descansar yo quisiera,
cuando la tierra me quiera llamar
y de ésta manera me fuera,
me fuera tranquila, a un divino lugar.