Hubo algo en tu mirada,es metralla.Que penetró en mi corazón,lance a cañón.Diste al blanco en la diana,ahí es nada.Y así empieza la batalla de este amor.He cargado con exceso,este beso.Que te lanzo sin temor,ni reflexión.Y es tan fuerte este disparo,asegurado.Que un abrazo, ha de ser tu rendición.Aún estás en pie de guerra,me demuestras.No te rindes, bravucón,sin ton ni son.Contraatacas con caricias,mis delicias.Y tus dedos desarman mi armazón.Esta guerra es silenciosa,misteriosa..Tú me amas y yo muero por amarte,esto es arte.Y los dos, cual dos cruzadosenfrentados,¡Hoy lucimos nuestro Amor como estandarte!.
martes, 1 de abril de 2014
Fuegos cruzados.
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El amor como una batalla y no vas muy descaminada que a veces es así. Pero ya sabes, amores reñidos, amores queridos.
ResponderEliminarMe alegra volver por tu blog tras un pequeño paréntesis Mª José.
Abrazos, amiga.
A mi me alegra que hayas vuelto Jero. No soy muy partidaria de las riñas, me aploman y desgastan, me sientan mal, por eso en el poema las hago a mi gusto. Muchas gracias por tu visita querido amigo.
ResponderEliminarUn abrazo.
El amor tiene tantos matices... no se entiende solo se siente.
ResponderEliminarBesos
Y hallarle explicación, para qué, el amor no necesita otra cosa más que sentirlo y expresarlo con acciones o con palabras, las dos cosas hacen bien.
ResponderEliminarNuevamente gracias y besos, Hanna.