domingo, 4 de marzo de 2012
Tres puñales
Vinieron a darme aviso
a mi puerta esta mañana,
tres golpes repiquetearon
que fueron tres puñaladas.
Dicen que te encontraron
cuando la noche apuntaba,
de la cintura colgado
de otra mujer y a su cara
le regalabas besos
como claveles en llama.
¡Moreno de verde luna,
clavelito deshojado
que por tu piel de aceituna
tenía al cielo olvidado!
Mira que yo te he querido
y tú me vuelves la cara,
y es que tu amor es fingido,
por eso así me lo pagas.
Tres puñales atraviesan
de parte a parte mi alma,
uno el engaño despierta,
otro desgarra mi calma
y el tercero me demuestra,
que mi querer para tí es nada.
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Ay, hija... que me has recordado la fuerza del Romancero gitano, de Lorca.
ResponderEliminar¡Qué bien escrito está esto! Me ha encantado.
Un cariñoso abrazo.