domingo, 25 de febrero de 2018

Sin imposiciones

A mi no me digas quién tengo que ser,
a mí déjame reír de lo que yo quiera
déjame que llore con lo que me arruga,
deja que perdone, y que me resienta,
y  que me equivoque y empiece de nuevo.
No me guardes turno porque igual no vengo,
no me guardes mesa, donde sea me siento,
no me planifiques, no estoy en el grupo
pero no te olvido, llámame y me apuro.
A veces parece que soy solitaria,
que vivo excluida por derecho y gana
pero soy de amar, sin gritos, callada,
amo con el alma y con la mirada
pero si en los brazos me ponen dos alas
y sé que en el nido ya no dejo nada
entonces mi vuelo arranca glorioso
sin límite y freno, audaz y juicioso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario