miércoles, 22 de agosto de 2018

Volviendo de ti

No me verás andar tras tus pisadas
ni beber de los vientos que respiras,
desfigurar la realidad es una trampa
que no puedo admitir por buena amiga.
Te he querido sin paz y sin medida,
amar no admite ser de otra manera
porque es flecha y porque es arco
fuerza y mano que lo tensa.
He cruzado contigo las fronteras
que yo misma me taché de infranqueables
levantando con mi mano las barreras
y adentrándome en tus puntos cardinales.
He vivido y disfrutado de tu esencia.
Ahora vuelvo a mi yo, siempre me acoge,
me da asilo, no me ofrece resistencia,
solo observa sin compasión ni reproche
 y me da el tiempo que falta
para que del corazón todo se borre.


2 comentarios:

  1. Lindos versos María Jose... anudados a buen ritmo para que el dolorido latir, no abata el ansia de seguir labrando el nuevo goce...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Hola Dionisio, muchas gracias por ofrecerme tu lectura y acompañarla con tus bonitas palabras. Encantada de saludarte.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar