No me verás andar tras tus pisadas
ni beber de los vientos que respiras,
desfigurar la realidad es una trampa
que no puedo admitir por buena amiga.
Te he querido sin paz y sin medida,
amar no admite ser de otra manera
porque es flecha y porque es arco
fuerza y mano que lo tensa.
He cruzado contigo las fronteras
He cruzado contigo las fronteras
que yo misma me taché de infranqueables
levantando con mi mano las barreras
y adentrándome en tus puntos cardinales.
He vivido y disfrutado de tu esencia.
Ahora vuelvo a mi yo, siempre me acoge,
me da asilo, no me ofrece resistencia,
solo observa sin compasión ni reproche
y me da el tiempo que falta
para que del corazón todo se borre.
Lindos versos María Jose... anudados a buen ritmo para que el dolorido latir, no abata el ansia de seguir labrando el nuevo goce...
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Dionisio, muchas gracias por ofrecerme tu lectura y acompañarla con tus bonitas palabras. Encantada de saludarte.
ResponderEliminarUn abrazo.